Navega, velero mío, sin temor, que ni enemigo navío
ni tormenta, ni bonanza tu rumbo a torcer alcanza, ni a sujetar tu valor.
Veinte presas hemos hecho a despecho del inglés,
y han rendido sus pendones cien naciones a mis pies.
"Tierra Santa - La Canción del Pirata (I y II)
(Poema de José de Espronceda)"
"Allá muevan feroz guerra ciegos reyes por un palmo más de tierra;
que yo tengo aquí por mío cuanto abarca el mar bravío,
a quien nadie impuso leyes."